Conocé la técnica Ho'oponopono
El Ho’oponopono es una técnica ancestral de sanación interior, originaria de Hawaii.
Nos ayuda a sanar, perdonar y reconciliarnos, para conectar con nuestro ser interior, con la divinidad y reconocer el poder creador que nos habita, nos da la oportunidad de la auto sanación a través de la palabra.
Ho'oponopono significa: “poner las cosas en su sitio” “hacer lo correcto con tu propio ser” “obrar en acuerdo con el propósito divino”
La práctica te ayudará a sentir la paz interior que te habita y para que dejes de buscar afuera lo que está en tu interior, es una filosofía que nos invita a hacernos 100% responsables de nosotros mismos y de la realidad que creamos.
Su práctica te ayuda a restablecer, equilibrar y armonizar el funcionamiento del cuerpo, mente y alma, haciendo un trabajo de limpieza profunda de memorias de dolor, creencias limitantes, programas antiguos que han ido creando tu realidad.
Esta técnica tiene el poder de sanar todo lo que ha quedado grabado hasta hoy en tu mente subconsciente. La práctica cotidiana te traerá paz y equilibrio
A través de las palabras que emiten una vibración y energía que reordena, limpia y armoniza todo lo que puede encontrarse en desequilibrio.

¿Para qué sirve?
La práctica se basa en mantrear o repetir constantemente palabras claves, también conocidas como palabras gatillo o activadoras.
Al repetirlas ante una situación de conflicto, una traba, una creencia limitante, conectamos con la divinidad y comenzamos a sanar, desde el origen de la situación.
Estas son cuatro palabras súper poderosas: Lo siento, perdón, gracias, te amo.
Las palabras pueden ir acompañadas de una oración concreta que indique a nuestro ser y a la divinidad que deseamos sanar y limpiar o podemos usarlas solas como un mantra, como una frase poderosa, u oración que nos sirve como una maravillosa herramienta.
Nos ayudan a trabajar situaciones determinadas o situaciones que no sabemos de donde vienen, están diseñadas para trabajar desde nuestro interior.
Lo ideal es repetirlas mínimamente tres veces, aun así, con la práctica contínua, está comprobado que con pronunciarlas una vez se pueden percibir sus resultados.
Podes decirlas en el orden que quieras y no es necesario que repitas las cuatro, vos podés elegir cuál decir y en qué orden.
Nosotras somos muy fan de esta técnica, ya que nos ha permitido trabajar creencias limitantes o situaciones con excelentes resultados.
Te invitamos a ponerlas en practica y escribirnos contándonos que te sucede al mantrear estas palabras.